Ya sabíamos que Supreme se había convertido en la marca más falsificada en el mundo, pero puede que ahora se haya convertido en la primera firma de moda de la que se ha suplantado a su creador.
La semana pasada, James Jebbia, fundador de Supreme, aceptaba en Nueva York el premio a diseñador del año en los CFDA Fashion Awards. Jebbia, alguien que ha hecho del secretismo y la distancia una imagen de marca casi tan famosa como su logo, dio un speech en la ceremonia, una de las escasas ocasiones en las que ha aceptado ponerse bajo los focos. Al mismo tiempo a miles de kilómetros, alguien se hacía pasar por el “presidente” de Supreme y para firmar acuerdos de colaboración con marcas chinas.
La identidad del suplantador no se ha hecho pública, pero sí varios vídeos que están circulando en las redes sociales y donde se le ve en un acto público rubricando un contrato. Mientras se aclara el caso, y esperamos una poco probable respuesta de la marca neoyorquina, este anónimo suplantador ya se ha ganado la admiración de muchos. Porque no todos los héroes llevan una camiseta (auténtica) de Supreme.