En sus años de formación 30drop descubrió nuevos sonidos sintéticos y electrónicos que luego influirían en su obra. A partir del año 1996, su actividad como DJ potencia su vínculo con la música, centrado en sonidos Detroit Techno y Techno que guardaban las referencias transgresivas de Birmingham, Reino Unido. Fue entonces cuando 30drop se centró en sonidos industriales, experimentales y basados en el ruido, particularmente a mediados de la década de 2000.
Tras una pausa creativa, 2014 trajo su nuevo proyecto y también nació su sello 30D Records del que se hace cargo con la colaboración de Angel Molina. Dos de la mentes más brillantes de la electrónica europea (te recomendamos que recuperes la charla que mantuvieron entre ellos en estas páginas aquí).
Mediante la experimentación, 30drop no crea su música simplemente como la culminación de sus inquietudes, sino como un canal de expresión. Las ideas gemelas de atemporalidad y multidimensionalidad están siempre presentes en el proyecto. El juego continuo entre la luz y la oscuridad a medida que la música transmite estos conceptos realmente lo define.
30drop lanza un nuevo álbum conceptual en Axis Records: “Photosynthetic Zone Manifesto” desarrollado como un experimento especulativo y basado en una hipotética evolución de la vida vegetal en diferentes entornos planetarios. También considera la posibilidad de que estas nuevas formas de vida alcanzaran una inteligencia avanzada y un desarrollo tecnológico.
Las interacciones a nivel molecular desarrollan diferentes formas de vida, desde las más simples hasta las más complejas. La vida tal como la conocemos se basa en el carbono y se desarrolla en condiciones ambientales muy específicas, mientras que se adapta en gran medida a sus cambios a través de la evolución. Pero, ¿qué podría suceder si algunas formas vegetales encontraran el camino a planetas distantes? ¿Cómo evolucionarían y se desarrollarían bajo una presión ambiental muy diferente? Son posibles otras combinaciones y, por tanto, también son posibles otras formas de vida. La vida vegetal podría convertirse en algo mucho más complejo, convirtiéndose en seres inteligentes si se dieran las condiciones y combinaciones necesarias para hacerlo.
El álbum retrata esas combinaciones moleculares hipotéticas y alternativas en forma de canciones. Expuestos a diferentes elementos químicos, condiciones gravitacionales y ambientales, los genes inactivos y las vías de señalización se activan y combinan de manera asombrosa. Y al igual que los eventos moleculares, los sonidos se combinan de diferentes formas, ya sean simples o complejas, para crear canciones que brindan una visión artística a ese concepto científico que abre hipótesis a otros tipos de inteligencia que están lejos de la humana y que podrían existir en lo vasto que hay. La parte conceptual de este proyecto se ha realizado en colaboración y con la supervisión de Meritxell Rosell, doctora en bioquímica y biología molecular.
Puedes escuchar “Photosynthetic Zone Manifesto” aquí. Bajo estas líneas puedes escuchar un minimix de presentación del álbum que hizo 30drop par The Brutalist.
