La historia era tan buena que parecía irreal: Dapper Dan, histórico sastre de Harlem que durante décadas “fusiló” logos de las grandes firmas del lujo para vestir a sus clientes afroamericanos, iba a colaborar con Gucci, una de las marcas a las que copió deliberadamente.
Bajo la dirección de Alessandro Michele, Gucci rendía así homenaje a este Robin Hood del gueto, que tuvo que cerrar su tienda en 1992 debido a las demandas que le iban llegando desde los bufetes de las grandes marcas. Se había hecho justicia poética.
Primero Dapper Dan apareció en la campaña de Gucci del pasado otoño, después se anunció la apertura de una tienda de Guccy by Dapper Dan en Harlem y, ahora, ya se pueden ver las primeras imágenes de la colección cápsula que el sastre ha creado para la firma italiana.
Esto es, los iconos habituales de la marca adaptados al barrio y al chandalismo de lujo.