Cada cierto tiempo hay una prenda que, cuando llega a las calles (y a las redes), sorprende al público y hasta a sus propios creadores. No sabemos si en Fendi eran conscientes de que una de sus piezas de su nueva colección podía recordar muy poderosamente a una parte de la anatomía femenina, pero lo cierto es que hay muchas personas que han hecho esa asociación de manera inmediata. Sí, ahí han visto una vagina.
Twitter ya ha bautizado la bufanda como la “vulva scarf”, y no han tardado en seguir las bromas, como aquellas que le añaden la etiqueta NSFW o que la pixelan para no herir susceptibilidades. Mientras tanto, la pieza ya empieza a agotarse en algunas tiendas online, pese a su precio de 990 dólares.
Así es: este invierno se lleva la vagina.