Un simple cálculo matemático te habrá hecho caer en la cuenta que contratar el servicio multipantalla de Netflix y compartirlo con tus amigos y familiares disminuye sensiblemente el precio. Por eso, la plataforma ha empezado a estudiar la posibilidad de ser más restrictiva en este sentido.
Y es que el plan familiar, que tiene un coste de 15.99 euros al mes, no tiene un número máximo de usuarios por cuenta (aunque permite hasta cuatro usando la plataforma al mismo tiempo) ni controla que todos residan en el mismo domicilio. Esto hace que muchos tiren de picaresca y compartan gastos con tanta gente como quieran.
Así que Netflix baraja dos opciones, o bien limitar la cantidad de personas con acceso a una misma cuenta o controlar quién tiene acceso a ella mediante direcciones de IP. La idea es terminar restringiendo el uso a un mismo domicilio. Desde la plataforma ya aseguran que el cambio en los términos de uso es inminente.