Carla Serrat lleva desde su debut discográfico en 2015, moldeando su sonoridad que se mueve entre el pop contemporáneo y la electrónica más sugerente. Emocionante, frágil y a la vez melancólica y bailable, la amalgama compositiva de CARLA se nutre de una voz seductora, una presencia cautivadora, ecos corales multiplicados en loop, paisajes evocadores que emergen de teclados y sintetizadores, y frenéticos ritmos sintéticos combinados con otros analógicos. Beach House, FKA twigs, Everything But The Girl, Chromatics, Jessy Lanza o Charli XCX son algunas de las referencias que se muestran presentes en su repertorio.
De la necesidad de conectar con otros artistas nacieron las colaboraciones de este disco. Es por ello que en “Reflection” aparece Gisela Fullà-Silvestre a.k.a NOIA (música y productora barcelonesa afincada en Brooklyn y cuyos trabajos publica Cascine), Jolly Damper, alias artístico de Joan Solana (músico y productor que acompaña a CARLA en sus directos) y el músico, productor y DJ Gunsal Moreno, reconocido por su nombre artístico beGun, con una gran remezcla de la canción “All I want is you”.
Carla continúa fiel a los preceptos sonoros que la han llevado a ser una de las artistas de pop electrónico más apetecibles del panorama: synth-pop, el neo-soul y la electrónica sofisticada. En “Reflection“, el talento y la inquietud de la propia Serrat acaba aumentando la paleta de colores estilísticos, siempre sembrados de su característica melancolía, encontrando coqueteos con el hyperpop, el glitch-pop y el dream-pop.
Las canciones de “Reflection” hablan de la necesidad de introspección, de conectar con uno mismo, de la soledad como espacio para la reflexión: de la búsqueda del yo entre una marea de momentos vitales confusos.
