Con motivo de su reciente lanzamiento en Seekin The Velvet ayer lanzábamos un Mix exclusivo de Meshes y hoy os traemos una entrevista en torno a su trabajo.
Meshes, recién relocalizado en Israel, es un productor y dj de ideas claras y gustos clásicos, con especial atención en los sonidos violentos, ruidosos y nervudos que caracterizan un espectro que se mueve entre el electro, el techno y el EBM. Su música es ejemplo paradigmático de ello: del punk y el noise originarios al sonido belga sólo hay un pequeño empujón, uno que pone en entredicho dicotomías como su nuevo EP, “Body, Soul”. Tres tracks, un remix de Mechudo y mucha, mucha beligerancia dan forma a su nuevo trabajo. Pronto conoceremos cómo toma forma en directo.
Acabas de lanzar tu último release, “Body, Soul”, ¿podrías hablarnos un poco de este EP? ¿Cuál es la idea que hay detrás? Me parece una de las referencias más concisas y contundentes de tu carrera.
El primer tema trata del cuerpo y la pasión, el segundo del alma y su sed de fundirse con otra. El tercero postula el deseo de liberación en el mundo donde nuestro cuerpo y nuestras almas se combinan en uno.
Además de éste, ¿en qué otros proyectos estás trabajando actualmente? ¿Quieres darnos alguna pista?
El próximo gran lanzamiento saldrá en Dame-Music, el sello de Bloody Mary. También tengo un plan de empezar mi propio sello centrado principalmente en la publicación de mi música personal. Supongo que ello significará la falta de marcos y etiquetas para mí de alguna manera; más libertad. Probablemente lo llamaré “Meshes Records”.
Recientemente has instalado tu estudio en Israel, ¿cómo ha afectado este nuevo contexto a tu producción? ¿De qué elementos se compone el hardware que tienes?
Me trasladé a Israel porque en la situación política actual no quiero tener nada en común con el gobierno ruso [Meshes es originario del país]. Odio esta guerra atroz y ya no veo mi futuro en Rusia. Me voy a vivir y trabajar a Israel. Tengo un par de cajas de ritmos, dos sintetizadores analógicos. Y hace poco hice una gran compra: el Waldorf Iridium. Decidí comprarlo porque siento que esta herramienta podría darme posibilidades verdaderamente ilimitadas, y lo más probable es que mi música vaya a cambiar mucho y muy, muy pronto.
Tu espectáculo en directo también se ha modificado. ¿Cuáles son las novedades? ¿Dónde vas a presentarlo próximamente? ¿Hay algo que te guste especialmente de tocar en directo? ¿Y de realizar sesiones?
La gran presentación de mi nueva música tendrá lugar en Berlín, en Hör, el 7 de septiembre. Tocaré en un showcase de Dame-Music. Probablemente el directo ahora sea un acto más íntimo. Mis búsquedas musicales de la forma más inmediata. Sin embargo, pinchar no es sólo “cómo veo una buena fiesta”, también es crear una historia cada vez. Mis historias siempre son apasionadas y eufóricas, con algún tipo de sabor sucio y oscuro. Creo que mis experimentos en djing son aún más atrevidos que el directo, en cierto modo.
Has lanzado tu nuevo trabajo con Seekin the Velvet, una plataforma muy respetada en nuestro país. ¿Cómo fue el contacto con ellos?
Cora Novoa simplemente me envió un mensaje para preguntarme si quería publicar en su sello. Es una música y artista a la que respeto mucho, así que fue un honor unirme a su equipo.
¿Para ti existe alguna correlación entre la danza, la espiritualidad y el cuerpo? Es algo de lo que hablé con Cora en el pasado y también me gustaría que nos lo contaras tú si quieres. Creo que el título de tu última obra lo sugiere.
Creo que la danza es un acto en el que nuestros principios físicos y espirituales están verdaderamente unidos. Entiendo la música como una corriente de sentimientos. La música electrónica de baile nos permite permanecer lentamente en esta corriente, relacionarnos con ella, mirarla. Con la ayuda de la danza nos involucramos aún más en ella. ¡Por eso la adoro!
También nos has preparado una mix para Beatburguer, ¿cuál es la idea que hay detrás? ¿Podrías explicarnos un poco el viaje?
Pasé con bastante atrevimiento de la electrónica elegante pero cruda a un material especialmente brutal… Y también del techno al final eufórico.
¿Hay algún estilo musical o estética que te contamine especialmente hoy en día a la hora de crear?
Siempre intento inspirarme al máximo fuera de la música. Busco nuevas estéticas en la literatura o el cine. Y luego integro esas ideas en la música.