El sello australiano Efficient Space rinde homenaje a la memoria del productor y MC Ali Omar con “Hashish Hits”, una selección póstuma de la discografía autoeditada del rebelde del dub.
Omar, uno de los diez hijos de una familia de clase trabajadora de Liverpool, recibió una profunda influencia de la herencia árabe de su padre, un hilo conductor central de su identidad y de sus orígenes en el mundo del sampleo. Después de la escuela de arte y de pasar un tiempo en los clubes nocturnos durante los días felices de Manchester, se mudó a Sydney, donde cofundó el dúo de ritmo downbeat Atone con su compatriota expatriado británico Andy Fitzgerald. Como MC, se infiltró en los circuitos de house, dub, jungle y bass de la ciudad, convirtiéndose en un habitual del Bentley Bar, donde dominaba el micrófono con su barítono versátil y retumbante y su carisma.
Omar, con un talento extraordinario en el estudio, fue un pionero del sampler Akai y de Atari, grabando hábilmente sesiones en directo directamente en DAT. El inconformista, que se basó en los conocimientos de su hermana, Beryl Marsden, una activista del Merseybeat que apoyó a los Beatles en su última gira por el Reino Unido y que firmó con Decca y Columbia, intentó construir un modelo de negocio autosuficiente. Entre 1998 y 2004, publicó de forma independiente cuatro álbumes en CD a través de su sello Hashish Studios, vendiendo copias directamente a las tiendas de discos locales y a los conciertos en directo para obtener devoluciones instantáneas, e incluso cosiendo a mano fundas de arpillera serigrafiadas para su último lanzamiento.
Inflexible en sus principios y negándose a soportar a los tontos o charlatanes, Omar disfrutó de la oportunidad de colaborar con aquellos que encarnaban el mismo espíritu. Hashish Hits ofrece una instantánea de su santuario interior: Fitzgerald en las chimeneas de humo ondulantes del tema de apertura, la voz serpenteante de Gina Mitchell y las manos mágicas del mezclador Louis Mitchell en “On Release”, y Kye de Wicked Beat Sound System en “Poor Man Beggar Man Thief”. Mientras tanto, “Suicide Bomber” arde con la tensión de una reliquia musulmana perdida, mientras que las instructivas “Roll Up” y “The Last Straw” se adentran cada vez más en el vórtice de producción característico de Omar, donde el espacio se extiende en cámara lenta y las paredes resuenan con un retardo que rebota.
Un verdadero ícono de la escena underground de Sydney, el enorme Omar falleció el 23 de junio de 2009 después de una valiente batalla contra el cáncer. Se le recuerda por su espíritu asertivo, su humor bromista, su personalidad anárquica y su lema imperecedero: “Ama y vive tu vida”.
