Ahora que los niños ya pueden salir a la calle y que el próximo sábado se podrá hacer deporte al aire libre no parece una locura imaginar que en un futuro no muy lejano los clubs españoles vuelvan a abrir. De momento, sin embargo, no nos queda otra cosa que echar la mirada a otros países que ya están volviendo a la normalidad, como es el caso de Corea del Sur.
El país asiático ha visto como sus nuevos casos diarios de COVID-19 se pueden contar con los dedos de la mano y, aunque las normativas de distanciamiento social se mantendrán hasta el 6 de mayo, el pasado fin de semana ya pudieron abrir algunos clubs.
Es el caso, por ejemplo, de Faust, vurt o Modeci, todos ellos de Seúl, que volvieron a abrir sus puertas el pasado viernes con una serie de normativas de seguridad estrictas, reduciendo el aforo y con una serie de directrices generales. Por ejemplo, no puedes entrar si has viajado al extranjero en los últimos 14 días, si ha estado en contacto con enfermos de COVID-19 o ha mostrado síntomas. Por supuesto, el uso de mascarilla es obligatorio.
En otras partes del mundo, China también ha abierto algunos clubs y Berlín ha visto como sus tiendas de discos han vuelto a levantar la persiana.