“Barcelona está llena de idiotas” es el título de una de las mejores canciones de Joe Crespúsculo y añadimos “rebosante de guiris de baja estofa”. La capital catalana se conoce a nivel internacional por su oferta de ocio nocturno, especialmente entre ese turismo de bajísima calidad, formado por turistas que no sobrepasan los 25 y vienen a pasar una semana a precios irrisorios. Barcelona Night Card es una nueva propuesta, pensada sobre todo para ellos, esos turistas que están más preocupados por ocupar un Airbnb, hacer acopio de alcohol en el paki de debajo, comer en cualquier cadena de fast food, comprar drogas en la calle y pegarse la fiesta padre en los clubs de la ciudad gastándose lo mínimo posible que por visitar la ciudad. Esta oferta hará las delicias de ese turismo de mierda que invade cada día las calles de nuestra amada Barcelona, teniendo la posibilidad de conocer algunas de las discotecas más conocidas de la ciudad a un precio tirado.
Esta card ofrece dos opciones: por un lado, nos encontramos el pase de siete días. Con un precio inicial de 20€ los turistas (e incluso las personas autóctonas que así lo deseen) pueden obtener un pase durante siete noches consecutivas a todas las discotecas y clubs que se encuentran en la lista de locales ofertados. Además, para los casos en los que el viaje dure menos tiempo, encima existe la misma opción pero con una duración de dos días, cuyo precio desciende a los 10€.
El único aspecto decente de todo esto es que las “sesiones especiales”, es decir con DJs de renombre internacional o sesiones especiales por ser fechas señaladas -por ejemplo Nochevieja- no están incluidas en el precio. Es de agradecer que en esas sesiones que al común de los mortales nos cuestan una media -tirando a lo bajo- de 20€ no les cuesten a una panda de cerdos de Londres que están de despedida de soltero por Barcelona menos de la mitad. Todo un gesto, sí señor. Pero ojo que no acaba ahí la cosa. Pongamos que un grupo de amigas de Leeds deciden celebrar la despedida de soltera de una de ellas en Barcelona, pues bien, después de ponerse ciegas en los peores establecimientos de Las Ramblas también podrán visitar en una misma noche (con sus correspondientes diademas de pollas) diferentes clubs con un mismo ticket, sin limitaciones de ningún tipo. Así pues podrán disfrutar de las instalaciones y del ambiente de por ejemplo Shoko, Sutton, La Terrazza, Slow, Moog o Macarena a un precio sonrojante. Otra bellísima manera de seguir destrozando una de las ciudades más bellas de Europa.