La institución del house clásico Smallville Records da la bienvenida a Dana Ruh.
En estos tiempos de momentaneidad en los que todo pasa muy rápido por nuestra cara y habitualmente desde una pantalla que llevamos en la mano, se hace más difícil prestar atención a las cosas de sabor antiguo, a las cosas hechas artesanalmente, a los productos más tradicionales.
No parece que vivamos en una buena época para que el house de calidad esté en el radar de lo molón, y los discos y sesiones de house de toda la vida no pululan por las redes sociales , los reels, las stories y todo ese circo de teenagers de cerebro plano.
Es por ello que a una outsider como yo, todo esto que va por encima del listón de la masa borrega me pone y más si viene acompañado de una portada tan horrible como esta, que ya sabéis si me leéis ( cosa que dudo ) que son mi fetiche.
Otro de mis fetiches es escribir sobre cosas que hacen mujeres como yo, es más mi obligación que mi fetiche, pero no lo hago porque sean hembras, si no porque son artistas superlativas.
Dana Ruh es una de las activistas del house crudo y underground desde hace eones de tiempo, la vida le dá para llevar un sello impecable, una tienda de discos de vinilo y además hacer música y salir a tomar algo.
Cuando produce, el resultado son como en este caso, esqueletos crudos de house, 909, samples clásicos y bajos de competición. Secos y cortantes, pero con una cantidad ingente de alma insuflada en su interior. House para toda la vida, house perfecto.