Continúa el sólido camino del sello argentino con la cuarta entrega de su serie CO.LAB, esta vez firmada por Jonas Kopp y Divide.
Aquí en Beatburguer somos tifosi de estos dos señores y una aleación de ambos metales no nos puede disgustar de salida. Ambos son estandartes del techno con visión de futuro y ambos van muy en serio en lo que hacen.
El resultado de su combinación de talentos no es para nada fácil ni previsible, es intrincado y rugoso, sucio y sideral todo mezclado.
En estos cinco ejercicios de baile inteligente transitan por galaxias desconocidas para el humano común, comenzando con la primera rebanada, 004 A, bombo sólido y secuencias contínuas como comienzo, detalles resonantes y afilados hi hats como salsa rítmica y mucho espacio entre los componentes en un ejercicio de minimalismo atmosférico muy serio.
Le sigue 004 B, más obsesiva y descolocada ¿jazz galáctico industrial?
En 004 C la sensación es densa y aplastante, con secuencias asimétricas flotando y mucha agresividad y realimentación sónica.
004 D experimenta con los ritmos quebrados y las texturas que recorren el estéreo, de nuevo administrado con la dosis requerida de riesgo.
Culmina este excelente trabajo con 004 E. marciana y muy sci fi, con un trabajo muy bien matizado en las frecuencias más altas del espectro.
Este debería ser el listón de calidad a manejar para separar el trigo de la paja en este panorama tan medieval que estamos sobrevolando últimamente.
