No solo en España cabe lamentar la incompetencia del gobierno a la hora de gestionar la crisis en sectores que -para ellos- son prescindibles como la cultura. Estos días, está causando un gran revuelo en el Reino Unido una serie de declaraciones de políticos y miembros del ejecutivo británico que denotan exactamente lo mismo: un nulo interés por que nuestra industria salga a flote.
Quizá la más llamativa sea la del Ministro de Hacienda Rishi Sunak, que en una entrevista a ITV News sugirió que los DJs, músicos y gente trabajando en el mundo de las artes impactadas por la pandemia deberían volver a formarse o encontrar otros trabajos. De hecho, cerró el grifo a nuevas ayudas y añadió: “No puedo pretender que todo el mundo hará exactamente el mismo trabajo que estaban haciendo al inicio de la crisis. Mi mensaje es que estamos haciendo todo lo que podemos para proteger cuantos más empleos mejor”.
Otra parlamentaria de los tories, Gillian Keegan, ahondó en las declaraciones de Sunak. “Como dijo el canciller, no podemos, lamentablemente, salvar todos los trabajos. Lo que podemos hacer es brindar a las personas las habilidades para encontrar y crear nuevos y mejores empleos». Así los trabajos que «no encajan» con Covid-19 pueden tardar «mucho en volver». «Estamos transformando las bases del sistema de habilidades para que todos tengan la oportunidad de volver a capacitarse». También aconsejó a los trabajadores que «tomen diferentes caminos en la vida».
La semana pasada también conocíamos las declaraciones de la Ministra de Sanidad, Helen Whately, asegurando que el clubbing no es una opción viable en este contexto. Hasta Carl Cox no pudo morderse la lengua.