Ya tenemos aquí la enésima carga contra Nina Kraviz en redes (y van….) Nina Kraviz ha respondido tajantemente a las estúpidas críticas -con alguna que otra reacción violenta incluida- por haber subido en su cuenta de Twitter fotos con su nuevo peinado Cornrows: trenzas al estilo africano. Personas que no rigen bien -pero que sí tienen acceso a redes sociales- le han hecho saber a la artista rusa que están en contra de su nuevo peinado e incluso la tachan de racista, afirmando que sus trenzas son apropiación cultural.
Ante tan lamentable reacción en Twitter (estercolero de analfabetos con carta blanca, paraíso de attetion whores y aspirantes a tertulianos de mesa-camilla de tercera divisíón regional) Nina ha respondido educadamente que ese tipo de trenzas no están específicamente vinculadas a la cultura africana, sino que también han siso usadas históricamente por vikingos, esquimales y otras culturas ancestrales.
Esta estúpida reacción ante un peinado -como si cualquier ser humano tuviese que justificar como lleva el pelo ante la muchedumbre de Twitter- también ha servido a los indocumentados para darle palos a propósito del nombre de su famoso track ‘Ghetto Kraviz‘, titulado así por el vínculo que tiene con el estilo musical ghetto house: las turbas de las redes sociales creen a pies juntillas que esto también es apropiación cultural.
La respuesta de los usuarios de Twitter ha sido dual, algunas personas han defendido su peinado y el título del track, mientras que otros piden que se cancelen sus bolos por racista… No cabe un tonto más en Twitter. Del beef en Twitter, destacamos bajo estas líneas el que mantuvo con Frankie del colectivo y agencia de Nueva York Discwoman. Lo que llevo a la rusa a llamarle racista y la acusara de intimidación y de alentar a la masa analfabeta a hacerle bullying, instando a la chusma iletrada a presionar a Kraviz para que se disculpe públicamente. Juzga tu mismo:
Kraviz ha borrado algunos de sus tweets, diciendo que las cosas se habían salido de madre y afirmó tajantemente que no es racista. En los últimos meses a Nina Kraviz se la ha criticado por absolutamente todo en las redes sociales: por su manera de pinchar, por su manera de vestir, por su peinado, por su manera de moverse en cabina, por ser mujer….por TODO. La envidia tiene un colchón de primera calidad en Twitter para gente que no tiene otra cosa que hacer en este mundo que decirle a una persona que no puede llevar trenzas africanas porque es blanca y que ello –cágate lorito– es “apropiación cultural” e incluso “nazi”. Aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid, alguna escoria humana ya ha dicho que “están hartas de blanquitas como Kraviz, Amelie Lens o Charlotte De Witte que pinchan música que solo es para negros”…. En fin, uno puede ser inflexible ante las cosas que no le gustan en este mundo, e incluso ser taxativo con la música de este tipo de artistas, pero vamos, hay que tener muy mala fe para tachar a Kraviz de racista por un peinado o por el título de un track. Lo dicho: no cabe un tonto más en Twitter.