Charlamos con Yoikol, DJ, productor y director del programa 808 en Radio Castilla-La Mancha, un espacio que te mantiene al día de la actualidad electrónica y que sirve de escaparate para los artistas de la escena nacional.
Hola Yoikol, muchas gracias por concedernos esta entrevista, ¿cómo va todo?
Gracias a vosotros por el interés. Todo va genial, inmerso en varios proyectos que me ilusionan mucho, desde el trabajo más puramente periodístico en 808 Radio hasta el de estudio, finalizando nuevos discos que están por llegar.
Me gustaría comenzar por tu programa de radio, 808, ¿cómo nació este proyecto y por qué ese nombre?
La filosofía de 808 es la exploración constante. Nos enfocamos en la búsqueda de nuevos sonidos, en darle protagonismo a artistas que están comenzando o que están haciendo algo diferente. Lo que nos diferencia es que estamos trabajando desde una radio pública como Radio Castilla-La Mancha, lo que añade una responsabilidad extra: ofrecer contenido de calidad, innovador, y accesible a una audiencia diversa. No nos limitamos a lo que está de moda o a lo que puede ser más comercial, sino que apostamos por aquello que creemos que tiene un valor cultural.
¿Cuál es la filosofía de 808? ¿En qué crees que se diferencia de otros programas de radio?
La filosofía de 808 es la exploración constante. Nos enfocamos en la búsqueda de nuevos sonidos, en darle protagonismo a artistas que están comenzando o que están haciendo algo diferente. Nos diferenciamos por esa actitud de descubrimiento, por no limitarnos a lo que está de moda o a lo que puede ser más comercial, sino por apostar por lo que creemos que tiene algo que contar.
¿Cómo es la dinámica de un programa 808?
Cada programa de 808 Radio sigue una estructura que hemos perfeccionado con el tiempo. Seleccionamos alrededor de 25 canciones por episodio, en los que mezclamos novedades, exclusivas y algunos redescubrimientos que creemos merecen una nueva escucha. Además, contamos con dos secciones clave: la primera es “Al Habla”, una ventana para conocer a los creadores, sus inquietudes y sus obras sonoras a través de entrevistas a artistas que están estrenando trabajos. La segunda es el “Generador de Ideas”, una colección de voces y personajes que muestran aquellas ideas destinadas a crear un mundo mejor.
Apostar por nuevos sonidos y nuevos artistas siempre ha sido vuestra seña de identidad. ¿No utilizar fórmulas mainstream es innegociable?
Definitivamente, es innegociable. No se trata de rechazar lo mainstream, sino de dar espacio a todo lo que tiene una propuesta auténtica. Queremos que nuestros oyentes descubran algo que no esperaban, que se sorprendan con nuevos artistas y sonidos que quizás no tendrían la misma visibilidad en otros medios. Que sepan y se den cuenta que no todo tiene porqué ser lo mismo.
¿Quiénes forman parte del equipo de 808?
808 Radio es un proyecto con una amplía trayectoria que se ha consolidado en el tiempo. En él también están, en cada episodio, System Efe y Nesec seleccionando música con criterios muy diferentes, algo que creo es importante. También tenemos DJs y productores invitados regularmente que se encargan del Basic Mix, lo que le da una gran diversidad al programa.
¿Habéis pensado en dar el salto a plataformas de streaming como Twitch o YouTube?
Ha habido algunos intentos y no soy un negacionista, al contrario. Cada vez que visito el nuevo estudio visual de Radio Castilla-La Mancha, creedme, lo disfruto al máximo, sea cual sea el programa en el que participe. Sin embargo, no estoy seguro de que el vídeo aportara algo más al concepto de 808 tal y como lo conocemos, sería otra cosa. Aquí somos muy de hacer imaginar con la palabra, de describir la música, esa que, precisamente, no se puede ver. Nuestras caras –a pesar de ser bastante guapos– no creo que sumen realmente. Además, el tema de los derechos de autor podría complicar bastante el formato en esas plataformas.
Vivimos una época de esplendor para la música electrónica, ¿notáis este interés creciente en vuestro programa?
Sí, sin duda. La música electrónica ha ganado mucha presencia en los últimos años, y eso se refleja en la cantidad de oyentes nuevos que se suman al programa. Lo que más me gusta es ver que la gente tiene curiosidad por aprender y descubrir más allá de lo que está en las listas más comerciales. Creo que, a día de hoy, en 808 podemos presumir de haber llevado estos sonidos a un escenario cotidiano y popular que antes no se concebía.
Ahora la palabra de moda en la escena musical es techno. El techno está en todas partes, pero mucha gente no sabe cómo definirlo. ¿Cómo lo definirías tú?
No voy a engañarte, el techno a mi me ha dado mucho, lo sigue haciendo; es la vía principal por la que canalizo mi creatividad en el estudio, pero en términos periodísticos si que es un tag que empezó a pesar hace algún tiempo, no por el techno en sí, si no por todos aquellos que subiéndose al carro –de manera consciente o no– han mancillado sobremanera el término, convirtiéndolo en un hibrido difícil de explicar. Tratamos de ser didácticos, pero lejos de ser académicos: allá cada cuál. Creo que mi mejor definición de techno, podría ser, escuchar alguno de mis últimos discos.
¿Qué opinas de la moda del hard techno? ¿Es una nueva forma de entender la electrónica como opinan algunos, o es simplemente un sonido reciclado del bakalao como aseguran otros?
El hard techno tiene raíces profundas, no es algo nuevo. Creo que siempre hay ciclos en la música, y lo que estamos viendo es una reinterpretación de sonidos que ya estaban ahí, pero llevados a un contexto más actual al que, quizá, en alguna de sus partes, le está faltando algo de criterio. Lo importante es cómo se utilizan esos elementos para crear algo que aporte. No nos engañemos, refritos siempre ha habido –incluso en las escenas más underground– hay que estar tranquilos y confiar, el público es soberano y es el que está poniendo las cosas en su lugar.
¿Cómo está la salud de la escena española?
Absolutamente invertebrada, medios menguantes. Como nos gusta decir por Castilla-La Mancha, se está convirtiendo en terreno quijotesco. Y no porque sea exigua; creo que más allá de los festivales y propuestas club de primera línea internacional que tenemos por aquí y, por supuesto, los artistas que han exportado durante décadas nuestro sonido, falta creérnoslo. Apoyar de verdad lo que se hace, empezando por colectivos que se la juegan en una nave trayendo a artistas de primer nivel, el artista que autoedita su trabajo, los medios de calidad que van más allá de la noticia. Hay mimbres y, lo más importante, mucho público.
España es un caso raro: tenemos los mejores clubs, los mejores festivales, tenemos el Sónar, tenemos Ibiza…, pero tenemos pocos DJs que sean reconocidos a nivel mundial. ¿A qué crees que se debe?
Lo he dicho antes, a no creérnoslo. También hay un circuito muy duro en el que, no lo vamos a negar, todo está “controlado” por británicos o alemanes, es lícito y normal y que se miren así mismos primero. Esa nota de corte hace que el que llega de aquí sea muy bueno, pero también nos meten unas bakalas importantes con “su” gente.
Recomiéndanos alguna joya que haya pasado recientemente por tu programa.
Una pregunta más que difícil, injusta de responder. Es tanta la gente que nos manda música, cada uno con sus ideas, sus formas de entenderlo tan diferentes, que se antoja imposible elegir a la torera. Pero me voy a mojar con algo que también puede responder lo anterior sobre el techno, escuchad el nuevo álbum de Bez Zed en Subsist: “Las mil y una caras”.
¿A qué nuevos artistas nacionales debemos prestar atención?
Todo, todo lo que te llegue merece una oportunidad. Olvida los nombres y haz una escucha activa, tu nuevo disco favorito siempre está por llegar.
Hablemos de tu faceta como DJ, ¿cuándo surgió tu pasión por la música electrónica?
La radio ha tenido mucha culpa de ello. Programas como Zona 3 o, especialmente, Siglo 21 y su director Tomás Fernando Flores, fueron claves en despertar mi interés. Además, recuerdo fragmentos de mi infancia escuchando Flaix FM durante los largos veranos en Benicàssim, cuando aún apostaban por la electrónica, antes de cambiar de rumbo. Aquellas emisiones en directo del Groove Parade de Monegros me marcaron profundamente.
¿Recuerdas tu primera actuación?
Claro, fue en un pequeño club de mi ciudad: Weekend Disco. Recuerdo los nervios, tendría 13 o 14 años, no lo recuerdo bien, pero sí con nitidez todo el proceso, de formación previa, de ir a la sala cuando estaba cerrada a practicar, de que César me abriera las puertas de su casa de esa manera, incluso confiándome una zona al completo una Nochevieja, que aquella sí que la recuerdo bien, fue la que empezó a circular el euro…
¿Cómo definirías tu estilo y a ti como DJ?
Diría que mi estilo es un viaje entre el techno y el house, siempre buscando esos momentos en los que la pista de baile entra en trance planeador. Me gusta mezclar lo nuevo con lo clásico, creando una narrativa que te lleva de un estado a otro de forma natural.
¿Dónde podremos verte pinchar próximamente?
Tengo varias fechas en camino, pero lo más cercano será el 30 de noviembre en el XXIX Aniversario de Family Club.
¿Tienes algún lanzamiento a la vista?
Han sido casi dos años de ritmo frenético, publicando música en plataformas increíbles que nunca había imaginado, como Bedrock, Illegal Alien, Sungate, y Children Of Tomorrow. Ha sido un proceso intenso que prácticamente acaba de concluir, y ahora estoy preparado para dar el siguiente paso. Aunque, por el momento, no puedo desvelar nada concreto.
Por último, para Yoikol la música electrónica es…
Una forma de vida, un lenguaje universal que trasciende fronteras y une a las personas a través de emociones que solo estos sonidos pueden provocar.
