Charlamos con este artista uruguayo sobre su nuevo álbum TIME y sobre su estilo inconfundible
Aunque nacido en Uruguay, Fernando Lagreca ha sido acogido por Barcelona desde hace la tira de años. Un personaje ya imprescindible ya no solo en la escena nacional, que también a nivel global -comanda además la agencia de artistas Miracle MGMT- que ahora regresa como productor firmando un nuevo álbum (‘TIME’, en Beautiful Accident) donde vuelve a demostrar su perfeccionismo y genialidad utilizando técnicas analógicas y digitales, así como un eclecticismo sonoro bastante ilimitado.
Con permiso, voy directo a la yugular. Tu nuevo álbum se llama TIME. ¿Qué sensaciones entraña este trabajo para ti? ¿Qué historias o conceptos querías explorar en este trabajo?
En este trabajo, la idea es un poco recorrer sonidos que de alguna manera me inspiraron o me influenciaron, o estilos que he estado escuchando en los últimos 20 años, dentro de la electrónica vista con una vertiente tal vez más ‘pop’, es decir, sin caer mucho en sonoridades ni techno ni house, ya que son sonidos que ya llevo explorando desde hace tiempo, y que sin duda me encantan, pero en esta oportunidad quería mostrar como algo más. Es un poco lo que intento cada vez que saco un álbum, que sea algo que me inspire, una historia que me guste contar pero que no sea algo fácil en cuanto a que se puede asumir que viniendo de alguien que lleva varios años haciendo directos de techno hardware por todo el mundo, que en lugar de hacer un álbum de techno que sería el camino más accesible en mi caso, porque es un género que lo cultivo, lo produzco, lo toco, lo bailo, pues al contrario, me pongo a investigar en otras cosas que también me llenan, de eso va TIME, de un recorrido de sonidos que siempre me han gustado y que coincide con un período aproximado de 20 años que son los años que estoy viviendo aquí en España.
Aunque todos dentro de la esfera electrónica, te manejas con diferentes estilos y formas ¿con cuáles te has sentido más cómodo en este LP? ¿por qué?
Para esta ocasión, aunque sin duda el disco suena electrónico, es que lo es, y yo lo soy obviamente, casi de casualidad, ha marcado un poco un volver a usar guitarras, bajo, sonidos de batería que tiran más a lo acústico, de hecho, hay muchísimo drum tocado de verdad, no programado rollo caja de ritmos, sino tocado, con pads electrónicos y samples, es cierto, pero usando grabaciones de baterías ‘de verdad’ con micros ‘de verdad’ y intentando hacerle un tratamiento a todo de manera que suene como ‘de ahora’ pero con cierta rugosidad analógica y hasta acústica por momentos, eso al menos fue mi ‘zanahoria’ mental, lo que intenté perseguir al hacer este álbum.
¿Cómo logras combinar tantas influencias diferentes en un sonido cohesivo? ¿Qué significa a día de hoy para ti el legado de nombres tan importantes como Underworld, Orbital o The Chemical Brothers? ¿Alguno más que te gustase destacar?
Pienso que lo importante al presentar un álbum es que haya una historia detrás, en este caso, yo siempre escuché mucho break, mucho ambient, mucho pop de UK, y para mí juntarlo todo es un proceso de selección bastante natural. En mi anterior LP, el ‘Infamous’ de 2020, incursioné por un abanico de distintos sonidos también, pero más desde un punto de vista de productor, creo que fue claramente un álbum de productor, todo muy pensado, fue lo que en ese momento me apetecía, ahora por el contrario, fue todo mucho más natural. Sin duda también hay un mérito muy top en el trabajo que se hizo de post producción con los amigos de Pobla Estudios en Valencia, con los que trabajé mucho esa especie de ‘pátina’ o hilo conductor que creo que tiene el disco, y es esa coherencia en cuanto a sonido general que creo que es a la que te refieres, en este caso, eso sí que fue buscado y trabajado, ya que mi objetivo fue que esa selección tuviera un orden y una resonancia común, que haga que el disco esté completo, tal como me lo imaginaba. Sobre los nombres que mencionas, bueno, son todos unos proyectos muy bestias, y sólo con haberme influenciado en ellos ya me parece genial, si al menos lograra un poquito de su calidad, pues bueno, ya sería top top… Además de los que nombras, sólo decir que soy muy fan de Leftfield, Fluke, Apollo 440, Crystal Method, FSOL, The Orb, Prodigy, etc…y eso sin nombrar a nadie de los artistas de DnB que admiro, gente como Roni Size, Goldie, LTJ Bukem, Adam F (el de los 90’s, que luego se me ha hecho un poco comercial el amigo), etc…
A la hora de preparar sets en directo, ¿pros y cons de adoptar y afrontar tanto eclecticismo?
El principal pro, es que como cada directo es totalmente distinto uno del otro, me lo paso bomba, improviso, cambio cosas, exploro, y aunque alguna vez hay algún errorcillo en directo, pues pasa desapercibido, al no llevar todo muy estructurado sino que es una sesión que se va montando casi on the fly. Como contra, que cada directo lleva una preparación previa importante en el estudio, en cuanto a seleccionar sonidos, samples, qué cacharros llevar a cada directo, etc, ya que no es lo mismo hacer un live en un club a las 03:00 am que en un Open Air, o que en un festival más ecléctico o de un público más transversal, me gusta adaptarme a cada situación, y ofrecer un producto lo más completo posible, pero eso lleva también un tiempo de preparación que no siempre está compensado. Y espérate, porque ahora estoy fantaseando con la posibilidad de armar una mini banda, en algún momento, para alguna presentación especial, de momento con la calma, pero igual en algún directo, se puede llevar a cabo.
¿Tienes algún recuerdo especial o anécdota de una presentación en directo que capturase mejor quién eres como artista? ¿Cómo podría influir la interacción con el público en los directos para composiciones futuras?
Recuerdos de directos tengo muchísimos, no todos los tengo presentes a toda hora, pero sí que hay algunos directos que disfruté mucho, como el Sónar 2015, o telonear a Jan Blomqvist en un tour que hizo por aquí en el 2017, más recientemente fechas muy buenas en Sudamérica, en Buenos Aires, Mendoza, Chile, un tour por India que fue una locura, o incluso el directo que grabé para Hör fue un momento que recuerdo con mucha expectativa. Y hay muchos más sitios en donde me lo pasé especialmente bien con mi live, recuerdo un festival en Lituania que fue muy top, algunos live en Berlin como fueron Ritter Butzke o Sisyphos, presentaciones en ciudades que me gustan mucho como Amsterdam o Londres, tours por México, etc, etc… La interacción con el público, o su respuesta, al menos lo que se puede más o menos percibir desde la cabina o el escenario es algo que siempre intento aprovechar para hacer cambios entre una presentación y otra, la audiencia es siempre sincera, y eso te permite más o menos distinguir los momentos que más funcionan, y en base a eso, pues vas quitando partes que ves que no convencen, o cosas que no tiran tanto, etc… No sé si de cara a composiciones futuras, pero sin duda utilizo y mucho el feedback inmediato de los directos para intentar mejorar entre uno y otro.
Queda demostrado, y más sabiendo los tentáculos que tienes, abarcando una nada despreciable cantidad de tareas (todas importantes) que eres capaz de controlar el ‘factor tiempo’ ¿cómo eres capaz de lidiar con todo y encima con tantísimo acierto?
Hee, ya me gustaría ser más eficiente, pero se llega a lo que se puede. Tampoco es que acierte en todo, qué va, siempre es todo un poco ensayo y error, y vas llevando un poco la cosa. Sí que es verdad que luego de un tiempo, hay ciertas rutinas de oficina en la agencia o cosas de estudio que ya las tienes optimizadas, y lo mismo sucede con las clases, que de tanto dar clases hay siempre como una base que está ahí, y que te permita afrontar varias tareas distintas dentro de una misma jornada, aunque todas están bastante relacionadas unas con otras, en el fondo todo mi mundo funciona en un entorno musical, o fuertemente ligado con la música, la cultura, etc. Me lo miro como un privilegio y entonces supongo que eso hace que no me cueste estar horas dedicado a esto, que la clave también es eso, muchas horas, y tener claro que esto es una carrera de fondo.
Facetas como la de dirigir una agencia de artistas, tu lado como docente, asesor, etc. ¿Piensas que estas actividades alimentan tu creatividad musical, o de algún modo las separas completamente de tu faceta como productor?
Las relaciono completamente, todo es parte del mismo puzzle, imagínate un puzzle de 1000 piezas que va cambiando de colores por zonas, una zona es azul, otra roja, otra amarilla, etc, y cada una de estas zonas no está delimitada de manera tajante, sino que hay grados, y transparencias entre todas estas zonas, y estas zonas se mueven todo el rato, pues esto es la historia. Hay momentos o temporadas en las cuales predominan más horas de trabajo en la agencia, otras veces, puedo dedicar más al estudio, otras más a clases, etc, etc, pero en el fondo es un todo que se va complementando y reformulando todo el rato, y todas las actividades estas que mencionas las veo como piezas vivas de este puzzle. Lo único que sí intento cuando estoy en etapa de componer y producir música para un álbum, es escuchar poca música, me aíslo bastante en este sentido, para no tener ninguna influencia justo en este período, por lo demás, que fluya.
Para cerrar. Teniendo presente las influencias 90s y 00s en tus nuevas producciones, además de tu experiencia y conocimiento de la escena, ¿cómo percibes la evolución de la música electrónica desde sus inicios hasta ahora?
Por un lado la veo un poco estancada a nivel sonidos, es como si siempre se usa la misma paleta de colores, que es muy amplia y casi infinita, pero se usa una paleta bastante concreta, es como un chef que cocina siempre con los mismos ingredientes, se ha evolucionado mucho, muchísimo, a nivel de técnicas, a nivel de efectos, de cómo sonar así o asá, de como usar compresión o ecualizadores de tal o cual manera, pero a su vez, la electrónica tiende siempre a revisitar cosas que ya pueden ser ‘clásicos’ como pasa sin duda en el rock, en el pop, heavy, indie, etc. Sí que es verdad que hay proyectos nuevos, que investigan más, que intentan innovar, pero la evolución de la música (no estoy hablando de la escena, ni de los géneros dentro de la electrónica, eso daría para una enciclopedia) electrónica está como música vista a nivel de género global, un tanto estancada. Ojo, que dentro de este ‘estancamiento’ que comento, hay montón de nuevos artistas, montón de nuevos productores, Djs, mogollón de proyectos de rock o pop que integran electrónica, o incluso de sonoridades más urbanas que beben muchísimo de la electrónica, se usan cada vez más herramientas de música electrónica para componer, etc, etc, es decir, no es algo negativo, la electrónica ha ocupado un terreno importante, y sigue creciendo en este aspecto, sólo que la veo como estancada a nivel creativo en cuanto a ser un género rompedor como lo fue en su momento con el advenimiento de los primeros sintetizadores, o cajas de ritmo, cuando surgió el sonido 808, 909, 303, etc, etc… me refiero a ese nivel. Seguramente el relevo en este tipo de cosas a nivel de novedades por ahí viene a partir de la IA, pero no vista desde el punto de vista actual, que es más una herramienta que genera cosas que hasta ahora las generaba el ser humano, sino desde un punto de vista de que la IA realmente cree nuevos paradigmas de sonoridades, que cree una nueva paleta sensitiva, nuevos sabores, pienso que por ahí pueden venir unos años interesantes, esperemos.
¡Un saludo y gracias por entrevistarme!