El festival de artes sonoras, visuales y digital-performativas Eufònic, que celebrará su XI edición del 25 al 28 de agosto en diferentes espacios del Delta de l’Ebre, anuncia hoy más artistas que formarán parte de la programación de este año.
El festival continúa apostando por el cruce entre la tradición y la contemporaneidad con actuaciones, instalaciones artísticas y espectáculos que revisitan el hecho, cuestionan los relatos dominantes y reinterpretan el pasado, desde la música y las acciones artísticas.
Electrónica y poesía
Entre las nuevas incorporaciones anunciadas hoy por el festival destacan la el compositor escocés Ben Chatwin, que visita por primera vez el país acompañado de una violonchelista: el músico desplegará su arsenal de sintetizadores modulares con ritmos brutalistas y resonancias emocionales. Chatwin tiene seis álbumes publicados bajo su nombre (y cuatro con el alias Talvihorros), Chatwin también compone música para cine, televisión, danza y teatro. Una de las propuestas más íntimas y delicadas del programa de este año.
Después de tener que cancelar su actuación del año pasado, Penelope Trappes, también actuará por primera vez en nuestro país, presentando la personalísima y sugerente trilogía “Penelope Three” en formado dúo y acompañada también de violonchelo, uno de los instrumentos con que trabaja más a menudo.
El espectáculo digital-performativo con bailarinas y un espectacular diseño de luces de la productora Claraguilar tomará forma en el Auditorio Sixte Mir de la Ràpita. La artista firma una de las creaciones más alabadas de este año, que transita entre el ambient, el techno y el movimiento.
El castillo de Miravet acogerá el directo de la americana Ulla Straus, que presentará “Limitless Frame”, un trabajo ambiental y meditativo. Además, la majestuosa contrucción también acogerá el espectáculo poético-musical de Ölivia Musyk, el nuevo proyecto formado por Clàudia Balletbó (voz) e Isabel Archs (violín y piano), con melodías cálidas y composiciones que se inspira en la composición clásica y en los sonidos experimentales. Como siempre, Miravet cerrará el fin de semana previo a los días centrales del festival.
Los valencianos Versonautas presentarán “Preludi a la Lentitud” en el Mercat Vell: un espectáculo de música y poesía que es una oda al gran mal del siglo XXI, estar ocupado. Un poema sonoro en forma de meditación colectiva que fusiona lo oral y lo escénico con la electrónica, la performance y el teatro. Una propuesta sorprendente y extremadamente seductora.
Joana Dark presentará su primer álbum, “Lireta”: una reinterpretación basada en una de las obras más importantes del folclorista Joan Amades, adaptado al contexto sonoro contemporáneo, donde pretende dar voz a la mujer del siglo pasado. Uno de los nuevos nombres de la escena catalana, que se verá en la Església Nova.
Ela Orleans, compositora polaca establecida en Londres, presentará en el Mercat Vell “L’Apparition”, un espectáculo basado en la obra de Gustave Moreau y en la leyenda de Salomé. Un espectáculo total que usa la inteligencia artificial, las proyecciones y la orquestación electrónica a base de violín y theremin para tejer un relato contemporáneo y feminista de la leyenda medieval, alejado de las reinterpretaciones masculinas hasta ahora.
Post punk de los 80, pop enérgico y hip hop retrofuturista
Nueve Desconocidos, el proyecto de pop electrónico del joven valenciano Ares Negrete, propone un verdadero paseo por la atmósfera más oscura de los años 80, una transmutación actual y festiva del sonido post punk, new wave y dark wave de finales del siglo XX. En Eufònic actuará en formado dúo, con teclados, guitarra y voz.
Rocío Saiz. (exvocalista de Las Chillers y Monterrosa) presentará su primer álbum en solitario, “Amor amargo”: un trabajo de pop electrónico que sugiere un recorrido emocional por las heridas que deja el amor cuando se acaba. La artista actuará en formato trío en el paraje natural de Ullals de Baltasar, cerrando un recorrido artístico en el paisaje que arrancará a las 10 h de la mañana.
Isamit Morales, La Niña Jacarandá, agitadora de la escena musical barcelonesa desde 2017, recorre el ambient y el reguetón, traspasa las fronteras entre estilos y deconstruye el club desde una dimensión política en una de las propuestas con más actitud del festival, cerrando la tarde del Mercat Vell el viernes.
Space Surimi, el grupo de hip hop retrofuturista que forma parte de la nueva y diversa generación de música urbana de Andalucía, serán los encargados de cerrar Eufònic 2022 en la Ermita de Ulldecona el domingo 28 de agosto. Su mundo está lleno de referencias a Internet y al consumo digital, a los videojuegos y a los productos de consumo, en un rap fresco e irreverente, difícil de encasillar, que transita por el electro más primitivo el gfunk, la música disco o el miami bass.
Instalaciones artísticas
La artista japonesa-coreana Ryoko Akama presentará una instalación artística de gran formato en el Centre d’Art Lo Pati de Amposta, donde reflexionará sobre la relación entre objetos y materias vivas a partir de herramientas domésticas. Comisariada por Arnau Horta, Akama pondrá en movimiento enseres cotidianos mediante energías invisibles como el calor, la gravedad o el magnetismo, originando situaciones efímeras que magnifican el silencio, el tiempo y el espacio. Siempre con el interés para examinar temas como el medio ambiente, la arquitectura, las migraciones o los conflictos y la fluidez de nuestra existencia, Okama es artista, editora, activista underground y compositora.
El Sindicat de la Ràpita, que el año pasado se instauraba como un espacio múltiple para las instalaciones artísticas, acogerá varias propuestas. Entre ellas, la de los canadienses Olivier Henley & Laurent Lévesque, en una pieza interactiva, “The Conservatory First Ramble”, donde los artistas se han dedicado a recopilar las plantas que han aparecido a los videojuegos desde la mitad de los 90 hasta ahora, que pone sobre la mesa la “musealización” de elementos sintéticos, traspasando las fronteras entre lo natural y lo artificial. También resignificando los materiales y la simbología, se verá “Campana” de Alfred Porres, una pieza que remite al uso ancestral de las campanas. Mientras antiguamente estas se fundían para hacer armamento, Porras propone el proceso a la inversa: una campana hecha con el ensamblaje de los casquetes de latón de los cartuchos de perdigones que usan los cazadores del Delta.
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