François Kevorkian es uno de los pocos housemasters que siguen en activo. El house, género fundacional de la electrónica de baile, se sostiene históricamente gracias a pilares igual de sólidos que los que aún podemos ver en el Partenón de Atenas. El legado de pioneros como Larry Levan, Walter Gibbons, Jim Burgess, Ron Hardy o Tom Moulton (los arquitectos del asunto) fue recogido por Frankie Knuckles, Larry Heard (Mr. Fingers), Marshall Jefferson, Steve Hurley , Lil’ Louis, Farley Jackmaster Funk, Derrick May o Kevin Saunderson en Chicago –la casa madre– y Detroit.
Ese testigo también fue recogido en Nueva York por Frankie Knuckles, Danny Krivit y Joaquin ‘Joe’ Claussell en las históricas sesiones “Body & Soul” que se celebraban en el Club Vinyl de Manhattan. Allí sonaba y se bailaba soul único: una mezcla de ritmos disco y dance orgánicos se agitaban en la coctelera con la espiritualidad del gospel y la contundencia de ritmos sintéticos -Kraftwerk mediante- del incipiente techno. Esas sesiones a seis manos se convirtieron en el santo y seña de la música house de Nueva York. Los domingos en Body & Soul eran diferentes: allí se daban cita personas de todos los ámbitos y rangos sociales, de todas las edades, de todas las razas, que levantaban las manos en el aire y celebraban la fuerza unificadora de la música. El Club Vinyl cerró en 2002 y lo que una vez comenzó un domingo por la tarde hace más de 20 años se ha convertido en un legado, en una fiesta que cierra las brechas generacionales y trasciende más allá del ámbito musical, convirtiéndose en CULTURA (sí, en mayúsculas).
Ya te hablamos de lo que supuso para la house music que François Kevorkian aparcase su carrera como batería para dedicarse en cuerpo y alma a hacer bailar a medio mundo, tanto como productor como DJ: puedes recuperar el especial “House sin equidistancias” que le dedicamos en estas mismas páginas aquí. Hace unos días, Kevorkian nos dejaba un sabor de boca agridulce publicando este texto:
“Cuando mi carrera profesional como DJ se detuvo repentina y totalmente debido a la pandemia provocada por el COVID-19, decidí comenzar a hacer sesiones en streaming en directo y gratuitas semanalmente desde el comienzo del bloqueo en marzo de 2020. Sentí que esto era muy necesario, ya que ayudaría a las personas a lidiar con estar encerradas en casa sin poder experimentar la música de la misma manera que estaban acostumbrados, y también me permitía permanecer conectado con todos los fans.
En el transcurso de estos seis meses, ya he realizado más de cincuenta sesiones de DJ en directo, abarcando muchos estilos musicales diferentes. La mayoría de ellas fueron luego editadas, masterizadas profesionalmente y publicadas online para vuestro disfrute. Son unas 150 horas de música. Aquí es donde se pueden obtener los enlaces a cada sesión individual, así como a las listas de reproducción que hice para ellas tanto en Soundcloud como en Mixcloud. Las publico con la esperanza de que esto pueda ayudar a que vuestro día a día sea un poco mejor, más brillante o simplemente para que os ayuden a dejar de pensar en la pandemia por un momento. Y es ahora cuando viene el mazazo: Si tienes ganas de ayudarme en estos momentos tan difíciles, puedes apoyarme con contribuciones a través de patreon.com/fknyc o donaciones en paypal.me/axisnyc ¡Gracias”.
Son muchos los artistas que no están pasando por un buen momento económico debido a los estragos que ha causado la pandemia en el sector del clubbing, y Kevorkian es uno de ellos. De los 50 mixes que ha publicado Kevorkian os recomendamos encarecidamente estos cuatro:
The Roots of House
En este live set François Kevorkian presenta algunos de los tracks que sentaron las bases de la house music en Chicago a mediados de la década de 1980. Los comentarios que acompañan al set explican detalladamente la transición de la música disco, el funk y el soul hacia sonidos más electrónicos (‘Proto-House’). Estos tracks demuestran cómo inspiraron a Ron Hardy, Frankie Knuckles o Marshall Jefferson a definir una estética y un sonido crudo, más duro pero muy fresco y hedonista que después conquistaría todas la electrónica de baile.
Tribute To The Divas
En esta sesión del 4 de agosto el housemaster rinde homenaje a las divas del house y del garage que pusieron voz a himnos imperecederos del género: de Loleatta Holloway a Patti Labelle pasando por Candi Staton, Cheryl Lynn o Chaka Khan, sin olvidar -edits históricos mediante- a la jefa de todas ellas: Aretha Franklin. Uno de los mejores tracklist que servidor ha escuchado del francés afincado en Nueva York desde 1975. Una técnica envidiable: es extremadamente difícil mezclar tantos temas vocales con ese gusto y savoir faire.
Motor City Soul
Kevorkian demuestra aquí que no hay techno sin house y viceversa. Este set del 18 de junio lo dedica a los innovadores del Detroit Techno. Dice Kevorkian que “es muy probable que su sonido futurista haya cambiado el rostro de la música electrónica”, y vaya si lo cambiaron: joyas de Carl Craig, Robert Hood, Underground Resistance, Jeff Mills, Moodymann o Theo Parrish se funden a lo largo de las más de dos horas de un set que debería ser matería obligatoria tanto para neófitos como para connaisseurs en materia techno.
Classic Skating Jams
A finales de los 80 y principios de los 90, especialmente en Estados Unidos, surgieron las Roller Discos: pistas de patinaje convertidas en clubs. Allí sonaban clásicos houseros y del downtempo que acompañaban las veladas más divertidas y estéticas de la época. Kevorkian y Kenny Dope (de Masters at Work) fueron habituales de sus cabinas y férreos defensores de la mezcolanza que allí se bailaba/patinaba: de Sugarhill Gang a A Tribe Called Quest pasando por Roberta Flack, Jimmy McGriff, The Spinners o South Bronx. Groove en vena y ruedas.