Dos de los buques insignia de la música contemporánea (y con más impacto mundial) parece que están volviendo a la casa madre: al house. Hemos visto a Kanye West en sus misas dominicales -Sunday Service- recuperar clásicos de la época dorada de Chicago y Detroit, nada nuevo, la cultura afroamericana está íntimamente ligada al house y al nacimiento de la cultura de club en EE.UU. No olvidemos nunca que los artífices de la house music fueron ellos, en estrecha colaboración con los colectivos latinos y homosexuales de Detroit, Chicago y Nueva York. En esos ambientes, en connivencia con lesbianas y trans -también, en su mayoría negras o latinas- es donde nació el house. De la casa madre se ramificaron otras tendencias musicales que luego serían virales en todo el mundo: la cultura hip hop y el rap.
Frank Ocean declaró hace poco que se ha pasado los últimos meses de gestación de su nuevo álbum escuchando a los clásicos del house de Detroit, Chicago y Nueva York. No sorprendes pues su nuevo anuncio: una fiesta que pretende imaginar cómo sería la escena del club de los 80 en Nueva York si se hubiera podido tener la medicación PrEP (profilaxis previa a la exposición) en la época.
En este post de Instagram de Gayletter, que recientemente sacó a Frank Ocean en su portada, “PrEP + es un homenaje a lo que podría haber sido en la escena del club de Nueva York en la década de 1980 si la medicación PrEP (profilaxis previa a la exposición) -que se puede tomar a diario para prevenir el VIH / SIDA para aquellos que no estén infectados pero esténn en alto riesgo- se hubiese inventado en esa época “.
