Después de comprar un rancho en Cody (Wyoming) valorado en 14 millones de dólares, y a tan solo unos días del lanzamiento de su próximo álbum, “Jesus is King“-previsto, en principio para el día 27 de este mismo mes-, la antigua casa de Kim Kardashian y Kanye West en Nueva York está en venta. El año pasado, la pareja lo vendió a su actual propietario, que ahora -en una jugada maestra- lo revende. La casa, ubicada en el famoso barrio SoHo de Manhattan, concretamente en el nº 25 de West Houston Street, fue diseñada por el reconocido arquitecto Claudio Silvestrin (una especie de Joaquín Torres, el famoso arquitecto que ha hecho el 80% de casas -todas iguales- de los jugadores estrella del Real Madrid).
El dúplex, de casi 1000 metros cuadrados, se ubica en el cuarto piso del edificio e incluye un dormitorio y dos baños (uno de los cuales es un tocador). Al igual que el “austero” interior -nótese las comillas en austero- de la casa de West Calabasas (California), su antigua residencia de Nueva York tiene islas de piedra en el baño y en la cocina, el suelo es de piedra caliza francesa de colores terrosos.
Otros detalles incluyen un sistema de control digital del hogar de la marca Savant, con persianas automáticas, iluminación personalizada y audio por cable. Dispone de portero las 24 horas y tiene una terraza ajardinada en la azotea con vistas de 360 grados del centro de Manhattan.
Emily Beare de CORE ha tasado “el piso” en 4.7 millones de dólares, una cantidad razonable considerando que sus otras propiedades alcanzan casi los 20 millones.