La cosecha del pasado mes nos deja destacados trabajos a cargo de artistas como The Weeknd, Khaled, Detroit Swindle o Alexander Kowalski
Lolina – The Smoke
“Fake city, real city, false city”, canta Lolina, el aka artístico más reciente de Inga Copeland. Por sorpresa, esquiva, como siempre, la artista publica un nuevo EP de 8 canciones titulado The Smoke. El nuevo trabajo rompe con su anterior Lolita EP y con el excelente álbum que publicó en 2017, Live In Paris, y a la vez continúa la misma línea artística.
Tachamos de caóticos aquellos sistemas demasiado complejos para comprenderlos. Así me gusta pensar en el sistema de Lolina: simple en apariencia, pero con una estructura interna fascinante.
Con este nuevo EP sigue escapando de las narrativas simples y habituales. Es original y reveladora incluso para la música experimental. The Smoke parece ser una divagación, un paseo por la ciudad Oyster card en mano.
Aleix Mateu
Alexander Kowalski – Cycles
Alexander Kowalski lleva en esto toda la vida, desde los tiempos de gloria del techno en los 90. Entonces fue cuando comenzó a editar discos a muy temprana edad y su último álbum bajo su propio nombre data de principios del siglo 21.
En este periodo de tiempo se ha centrado en sus proyectos d_Func y Disx3 y es ahora cuando retoma su nombre de pila para este nuevo larga duración en Mord, casa del techno más combativo y rugoso.
El álbum se gesta como un homenaje a ese sonido crudo y maquinal de los 90, utilizando piezas icónicas como la Roland tr 909 y viejos sintetizadores, construyendo un discurso musical áspero y primario, sin muchas florituras, denso y duro al tiempo sin perder el ojo en la pista de baile.
Todos los cortes tienen un diseño sonoro común y suenan muy familiares entre ellos y en conjunto conforman una obra única que resume lo que debe ser el techno en esencia. Desde cortes más ambientales hasta retazos de ritmos rotos y mucho 4/4 para satisfacer a las maletas más exigentes. Un trabajo imprescindible y atemporal que todo fan del techno debe tener en su colección.
Luis Rozalén
Detroit Swindle – High Life
El segundo disco de Detroit Swindle está, en general, a medio camino entre la planificación y lo orgánico de la improvisación en directo, lo que dota a este trabajo de vida propia. Funk, free-jazz, soul, afrobeat… una combinación redonda que Lars y Marteen nos regalan a lo largo de 10 cortes con tres interesantes colaboraciones (Jungle By Night, Tom Misch y Seven Davies Jr.).
Ketama Gold y su referencia directa a una de las resinas más deliciosas creadas por la industria cannábica (y su relación con el título del disco, High Life) es un apasionante corte de experimentación jazzística, como la intro a cualquier concierto, casi sin percusión y con un inspirador loop vocal que aparece casi tan rápido como se desvanece. El corte que da nombre al disco es otro increíble ejercicio de jazz modernista e interpretado bajo las reglas de los Swindle, sutil, bailable y líquido a ratos; y, por destacar otro, Ex Machina, con aire más experimental y basado en el jam, con ritmos más marcados y un poco fuera de la línea del resto del disco.
Un disco redondo que estaremos oyendo en las pistas más selectas de la escena.
Eduardo Pérez Waasdorp
Khaled – Rouge
Entre dos mundos. Así suena la música de Khaled: la herencia marroquí y la herencia andaluza siempre han cristalizado en sus temas creando un sonido tan personal como auténtico.
Rouge es su nueva mixtape en solitario y sin lugar a dudas podemos decir que es su trabajo más maduro hasta la fecha. El artista, escapando del corsé más rapper y del trap, ha dejado constancia de que el aroma a calle Elvira se pega a cualquier tipo de ritmo que se proponga, porque en esa calle suenan todos estos palos y mas.
Pero Khaled no se olvida de su sonido más característico. La rabia y agresividad con la que se monta los ritmos de trap es su seña de identidad más extendida.
Aleix Mateu
The Sabres of Paradise – Lick Wid Nit Wit
The Sabres of Paradise es el mítico proyecto formado por Andy Weatherall, Gary Burns y Jagz Kooner, con sendos álbumes editados en el también mítico sello Warp en los noventa.
Este EP es un combinado de remezclas de un corte clásico de los británicos, de la mano de A Sagitarium, la una en clave directa a las pistas más tecnoides, hipnótica cíclica y abstracta, la otra con los breaks y las atmósferas como protagonistas.
Se incluye también el tema original, tribal, oscuro y lisérgico, que a día de hoy sigue sonando arriesgado y futurista. Un disco que tiene un poco de todo y todo de la máxima calidad. El típico vinilo que en breve valdrá su peso en oro en el mercado virtual.
Luis Rozalén
oklou – The Rite Of May
Así es como debe sonar la música pop de nuestro siglo. Emotividad en su voz suave y procesada, emotividad en las atmósferas que la acolchan. Y una forma de apropiarse del R&B y las producciones de club vanguardista única.
El sonido no es nuevo. Desde que publicara su Avril EP 4 años atrás la artista ha estado explorando terreno parecido. Ahora, con su nuevo trabajo, nos ofrece el diamante pulido del todo.
La artista francesa debuta con The Rite Of May en NUXXE, el sello de su compañera y paisana coucou chloé. El trabajo consiste de 6 canciones: dos pasajes melódicos, Valley (donde se recrea con su voz y juega con ella) y Valley 2 (donde juega de forma intimista y emotiva con el piano), y cuatro canciones que muestran sus mejores registros.
The Rite Of May nos deja entre dos mundos, suspendidos en una deriva emocional entre recuerdos.
Aleix Mateu
Essaie Pas – New Path
Un álbum basado (libremente) en una novela del maestro de la ciencia ficción Philip K. Dick, A Scanner Darkly, suena, a priori, demasiado sesudo. Pero si detrás sabemos que se esconde el matrimonio formado por Marie Davidson y Pierre Guerineau podemos tener la certeza que sabrán encontrarle el punto lúdico.
Así bien, los canadienses parten de la coldwave que recientemente ha explorado ella por su cuenta y entregan un álbum de electrónica desquiciada con la que quieren explorar temáticas de rabiosa actualidad como la adicción, la pérdida y la identidad y la obsesión en las redes sociales.
New Path puede sonar a veces frío, paranoico y desquiciado, pero también sexy, juguetón y extremadamente bailable: Complet Brouillé es casi un single pop y Les Agents Des Stups es un techno de beats frenético que recuerda al reciente trabajo cinematográfico de Oneohtrix Point Never.
Álvaro García Montoliu
Tom Trago – Bergen
Bergen es el título de la joya que el productor holandés Tom Trago nos presenta en el sello satélite del mejor festival del mundo: Dekmantel. Siendo un paso natural en su carrera, este Bergen es su cuarto álbum de estudio es sutil y vuelve a las raíces de Trago, con una nueva perspectiva de producción, a medio camino entre el house cósmico, las atmosferas y la delicadeza sintetizada.
Entre los temas más destacados para nosotros, Faith Belong To Us, con esos loops vocales y ese toque funky; o el ambiente más etéreo y sensual de Always Be With You, con esa melodía de sinte que resalta por encima del resto de elementos. Aunque el que más nos ha impactado, por su carga ambient y tratamiento alejado de la pista ha sido Underwater Wings, que demuestra una faceta muy interesante de Trago.
Reminiscentes de electro a ratos, Bergen supone un salto en la carrera de Tom, sin duda alguna.
Eduardo Pérez Waasdorp
Papi Trujillo – Jibaro (Vol. 2)
Papi Trujillo es uno de los artistas del panorama urbano más solvente y eficaz. Al mando de su propia música bajo el pseudónimo de South Classic, el sonido de Papi Trujillo sabe de dónde viene, sabe a dónde va y, lo que es todavía más importante, sabe dónde está.
Su nuevo álbum sigue la línea que abrió con Jibaro en 2016 y de la que nos ofrece el segundo volumen. 11 canciones de trap sin adornos que destilan ese aroma latino con el que Papi Trujillo impregna cada ritmo cuando salta encima.
Desde su proyecto en Corredores de Bloque, el madrileño ha sabido actualizar su propuesta y estar constantemente en sintonía con el sonido de los States. Con Mama Forgive Me, una de las canciones más destacables de la tape, vuelve a demostrarlo.
En las colaboraciones vocales de la mixtape no le hace falta alejarse de su propio universo: Flaccosucio, Cuban Bling, Kevin Swing, Zapboy, Gengis Kash, Yung Sarria y una incorporación que nos sorprendió gratamente a todos cuando lo vimos en los stories: Yung Beef en la balada I Wish U.
Aleix Mateu
The Weeknd – My Dear Melancholy,
Lanzado casi por sorpresa el pasado Viernes Santo, My Dear Melancholy, (no, esa coma no es un error tipográfico, sino más bien una pista sobre una posible segunda parte) es el nuevo álbum de The Weeknd, aunque por su extensión es imposible no verlo como un EP.
Lo más evidente de este trabajo es que, en sus seis canciones, vemos un regreso explícito a sus raíces nihilistas de su trilogía de mixtapes de 2011. Quizá no lo esperábamos tan pronto, pero teniendo en cuenta lo añorado de ese sonido, tampoco le haremos ascos.
El disco está lleno de contradicciones, y eso es quizá lo que lo hace interesante. Abel Tesfaye se muestra obsesionado con la ruptura con Selena Gomez a niveles francamente preocupantes en el actual clima social, pero esto nos muestra una faceta vulnerable y honesta que se echaba en falta en su música.
Como siempre, Tesfaye sabe rodearse bien, y casi todos los colaboradores cumplen con creces, especialmente un Skrillex que insiste en su actual obsesión 2-step para entregar un banger que debería hacer mucho daño este verano, Wasted Times.
Pero la verdadera estrella de la función es una Privilege que es con un descenso a los infiernos emocionales del canadiense y algo que no debería quedarse en una simple rareza, sino más bien servir como puerta de entrada a un eventual segundo maxi aún más oscuro.
Álvaro García Montoliu