
Tres magníficas piezas electrónicas de formato largo, melancólicas, atmosféricas y expansivas a cargo de Nihiti.

En cierto sentido, se trata de música de salón que sigue un linaje que se extiende desde Erik Satie hasta William Basinski. El tema que abre el disco, “Stellar Observer” se desarrolla a lo largo de 21 minutos (un solo lado del vinilo), y se centra alrededor de dos pads repetitivos que parecen recordar los movimientos más elementales: flujo y reflujo, inhalar y exhalar, sostener y soltar. Las sonoridades analógicas emergen en la periferia, amenazando con estallar pero nunca lo hacen. Repetitivo pero también sorprendente.
En la otra cara, “Tetrachrome” muestra un suntuoso ruido digital en sonoridades tipo Blanck Mass/Fuck Buttons: una ola de electrónica y distorsión de modulación que se tambalea al borde de la abrasión. Por otra parte, “If The Color” (coproducida con el artista visual y músico Viktor Timofeev) nos brinda los momentos más melancólicos del disco, con una muestra vocal baja y fragmentos de discurso sobre sintetizadores melancólicos.



