“Layers: 1975-2004” es una colección retrospectiva de grabaciones de las leyendas de la música abstracta de Texas, Onions.
Onions, un colectivo anónimo y en su mayoría oculto que allanó el camino para gran parte de los linajes de música libre y experimental en expansión de Texas, es el “nombre de guerra” de una red de músicos y artistas centrada en su principal exponente, Dan Clark, también conocido como Lienad Kralc, y su socio musical Greg Cain, también conocido como Gerg Niac. Inicialmente concebido en 1969 como un vehículo de colaboración para Clark y su amigo de la infancia Robert Fuentes, cuyas primeras grabaciones electrónicas con osciladores caseros e instrumentos musicales electrónicos sirvieron como una influencia formativa crítica para la mente del joven, esta versión del proyecto lamentablemente nunca se haría realidad, ya que Fuentes falleció en noviembre de 1970 en circunstancias extrañas y trágicas. Sin embargo, el mes siguiente, Clark comenzaría a registrar sus primeras exploraciones con una de las construcciones de Fuentes.
Poco después, a principios de los años setenta, un amigo en común llamado Greg Cain se uniría a Clark en un cobertizo detrás de la casa de su madre, y se sumergirían más profundamente en estas sesiones, explotando instrumentos caseros, grabadoras y todo tipo de generadores de ruido. El círculo continuó expandiéndose en las décadas siguientes, con la incorporación de la pianista Lindall Cain y Keith Montgomery, así como el guitarrista principal Blackie Leopold, Jody Detton y James Hatfield. Fue Keith quien se le ocurrió el nombre Onions y todos los miembros del grupo invirtieron sus nombres. En los años noventa, sus filas se expandirían nuevamente con la incorporación del arsenal de electrónica basada en computadora de August Smith y los artistas invitados Mike Kimbrough en los teclados, Danny Miracle en la batería y los artistas Tom Boberg y Carli Scales.
Juntos, en varias configuraciones, desarrollarían un sistema de interpretación sin líderes ni reglas. Los músicos pudieron explorar su terreno sonoro sin restricciones por las convenciones. Dedicados a su filosofía de “sin sobregrabaciones”, Onions construía estructuras musicales elaboradas a través de improvisaciones en vivo y alteraba esas estructuras para crear tensión y cambios dinámicos, hasta llegar a un clímax al final de cada sesión.