El artista OST FOX presenta su álbum de debut “Seulement à Marseille“.
Este larga duración, está compuesto por ocho cortes originales con inclinación al techno y centrados en la pista de baile. Creado durante una temporada en la ciudad de Marsella, en el sur de Francia, como sugiere el nombre, el LP ‘Seulement à Marseille’, que se traduce como Only In Marseille, es un proyecto que captura un espacio y un tiempo en la mente del artista OST FOX, que suele vivir en Berlín.
Atraído por la ciudad a través de un encuentro casual con un artista del tatuaje de la ciudad, el artista se propuso hacer un álbum allí, lo que se desarrolló durante siete semanas fue este proyecto y una afinidad por la escena musical de Marsella, como L’intermédiaire, los eventos y el increíble colectivo Metaphore, así como la mezcla de crudeza, belleza, comida increíble y, lo más importante, gente increíble de la ciudad.
“Vieux Port” abre y captura sonoramente la euforia de la llegada a Marsella, una composición con tintes house brillantes y progresivos y una contraparte de la sensación más centrada en el techno del resto del proyecto.
“Quartier de Créateurs”, que lleva el nombre de la región en la que se creó una gran parte del proyecto, encapsula perfectamente su estética central a través de un trabajo de sintetizador dinámico, una línea de bajo animada y una rítmica nítida.
“Noailles to nowhere” es un interludio cinematográfico que dirige hasta “Metaphore”, una excursión nebulosa de cinco minutos y medio a través de acordes dub vibrantes, bajos pulsantes, cuerdas atmosféricas y una sección rítmica sólida.
“Le Champ de Mars” mantiene una estética similarmente melodiosa con inclinaciones al techno de Detroit y un enfoque en sintetizadores dub delicadamente entrelazados, un ritmo de bajo serpenteante y percusiones saturadas.
“L’Intermédiaire” se adentra en un territorio más oscuro con punzadas de bajo turbio, una tensión atmosférica uniforme y un trabajo rítmico de alto octanaje, dando paso a, “Le Style Marseille” inclinándose hacia un tempo más bajo y melodías de ensueño antes de que “Réflexions”, acertadamente titulado, concluya con una sensación electrónica contemplativa de los noventa, fusionando pianos centelleantes, graves profundos y texturas etéreas para cerrar perfectamente el proyecto.