Como mucha de la música que estamos disfrutando en este momento, el disco que tengo entre manos fue compuesto durante los días duros del confinamiento, época oscura para la vida en el planeta pero de enorme importancia para la creatividad de aquellos que pudieron mantener la cabeza despejada. No se porqué me huelo que vamos a echar de menos esos tiempos en los que gastábamos sólo dos bragas a la semana ante la ausencia de vida en nuestras vidas.
La creatividad sin límites de este periodo oscuro se ve reflejada a la perfección en este trabajo que me ha sorprendido gratísimamente. Tiene tanta calidad que es imposible ponerle la maldita etiqueta obligatoria, así que por favor perdonadme que la incluya en techno, lo siento en el
alma.
En el tema que abre el EP “Lost in an Alien Jungle” escucho por este orden: ritmos sintéticos, vocales tribales africanos, jazz a lo Chick Corea… y veo a Francois Kevorkian o Joe Claussell machacándolo en el mejor club de Nueva York.
“Hostile Land” viene a continuación: groove reposado, cuerdas profundas, líneas de bajo super trabajadas y mucha intensidad sonora. Hipnosis delicatessen.
“Escape” tiene sabor tropical en los samples y las atmósferas, música de clubazo diurno con un whisky de 50 pavos en la mano y bañador vintage de una pieza.
“Turbulence” se pone un poco cabrona con su ápice de distorsión y rudeza bien administrada: no es techno, no es house, no sé lo que es pero me gusta. Tiene toda la pinta de liarla muy gorda en una pista potente si la pones en el momento correcto.
Maravilla de disco, personal y sin deudas con nadie. Bailable y disfrutable con atención: voy a poner a estos señores en la lista de imprescindibles right now.
