Cuando hablamos de la figura de los songwriters contemporáneos podemos pensar en manidas referencias sobre el caracter reivindicativo del género, a un lado y otro del mundo. The Slaughter Daughter pretende ir más allá de las estrictas convenciones a trav´és de un discurso sonoro tan amplio y maleable como oscuro y melancólico.
A lo largo de 2020 y 2021, el proyecto debutante de la artista barcelonesa Celia Bernal ha ido tomando forma bajo el sombrío alias The Slaughter Daughter. Nacido inicialmente como una necesidad de expresar de manera catártica l angustia existencial individual, su narrativa ha evolucionado hacia una concienciación sobre las vivencias colectivas y la violencia psicológica inherente a este sistema económico.
Producidos en The Bass Valley por Samuel Escudero (Derobla), los ocho temas de su primer álbum, “The Dark, The Violence“, tratan del hastío desde perspectivas híbridas que viajan desde el folk y el ambient hasta el post-metal, todo mediado por arreglos preciosistas salpicados por el hechizante de la electrónica más exploratoria. En ellos cuenta con la participación de Jaime Díaz Otero (Obsidian Kingdom, Myrkur, Foscor, Kinsale) e Izaskun Barbarie. Gran experiencia íntima y sonora.
