Un estudio realizado por Music For All concluye que escuchar música en el trabajo aumenta la productividad. En el estudio, se pidió a 2.000 trabajadores que hicieran una transcripción de 600 palabras. En la primera prueba se pidió a los trabajadores que hicieran la transcripción en silencio -sin escuchar música-: de promedio completaron la tarea en un tiempo de 20 minutos y 59 segundos. La segunda prueba -escuchando música mientras hacían la tarea- la completaron -de promedio- en 17 minutos y 42 segundos. La diferencia fue de tres minutos y 17 segundos, es decir, completaron la tarea un 15% antes que no escuchando música.
La investigación recopilada por Music For All destaca numerosos beneficios para la salud física y mental, tanto cuando tocas/haces música como escuchándola, además sugiere que aprender a tocar un instrumento cuando somos niños beneficia a la memoria, la capacidad verbal, la velocidad de procesamiento, el entendimiento y la atención. Una vez finalizado el estudio, Scala Radio entrevistó a la doctora en psicología Becky Spelman a propósito de los efectos positivos de escuchar música en el trabajo. La doctora explicó que estaba sorprendida por la diferencia de tres minutos, pero cree que la música tiene “un impacto muy poderoso en el cerebro” y que “afecta el estado de ánimo, el rendimiento mental y el rendimiento físico de las personas”.