Marching Machines: Melancholie 0100 (Slow Motion Records)

Estoy confundida, recibo un disco de un sello que tiene como lema Italian Dance Wave y resulta que no es italo disco. Esto es un sin dios. La portada parece italo disco, la tipografía también, hasta los primeros compases del primer corte parecen italo disco, pero no, es otra cosa. Otra cosa que tal vez me gusta más de lo que a priori pensaba que iba a escuchar, pero que tampoco es que me dé la vuelta a la cabeza: sorpresas te da la vida.

Marching Machines

Marching Machines son un dúo de productores que ya tienen una edad por lo que intuyo en la foto promocional, e intuyo también que beben de la influencias que en su momento tuvieron en tiempo real, por eso suenan a antiguo.
Lo que realmente sorprende y vale la pena de este disco son los remixes, en los que se esconde mi venerado física y moralmente, Curses bajo un nuevo alias: Venice Arms. Aislándome de lo musical, apuntar que es exactamente el tipo de tío que me pone como una moto de carreras (ver foto), si tuviera 15 años me ponía esta misma foto en la carpeta del instituto y eso lo sabe Dios.
El caballero recicla el simplista discurso original y lo muta en una suerte de
breakbeat junglista extraño en su remake de nombre Hardcore Remix y lo electriza ácidamente con mucho tino en el segundo de los remixes, conservando parte de la melodía del original, pero sin sonar tan obvio.

Curses/Venice Arms

Respecto a los originales, pues lo que he comentado antes, efectivos, sin sorpresas, para ese tipo de personaje que va los clubes a no sobresaltarse mucho.