Probablemente te acordarás que el pasado abril Nina Kraviz ofreció una actuación en directo en el festival californiano Coachella con un enfoque más cercano a la performance que al show de techno de rigor. El escenario se ambientó como si fuera el salón de su casa, con espejos en los que posaba y un sofá incluidos.
En la crónica de L.A. Times lo comparaban con una película de Lars Von Trier, pero el espectáculo concebido por la rusa, Deniro y Sila Sveta no fue especialmente bien recibido por sus fans.
Ahora tienes una oportunidad de juzgar por ti mismo. Míralo al completo abajo. En Paper, además, ha compartido sus impresiones sobre todo lo que ocurrió.